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La personalización es un factor clave para el desarrollo de envases adaptados a las necesidades de los consumidores. Para conseguir esta individualización de packaging, se opta por la aplicación de diversos sistemas de agarre, apertura o conservación de producto. Como es el caso de los troqueles, los tapones o las válvulas desgasificadoras. A continuación nos centramos en las principales ventajas que ofrece el zip, un sistema de apertura cada vez más utilizado en el embalaje de productos de primera necesidad. Esto es todo lo que debes saber sobre las bolsas con cierre zipper.

Ventajas de las bolsas con cierre zipper

Las bolsas o doypacks con cierre zipper se ha convertido en uno de los envases de referencia entre productos de primera necesidad. Tanto para la industria cosmética como alimentaria. Su éxito se debe, en gran medida, a su gran capacidad de conservación. El zipp es un sistema de apertura y cierre hermético que prolonga la vida útil del producto, ya que no permite la entrada ni salida del aire. Además, evita el contacto con suciedad, polvo y/o humedad.

Ideal para productos de consumo repetido o reutilizables

Este sistema de apertura brinda practicidad a un usuario cada vez más exigente y con unas necesidades de consumo muy diferentes a las de hace unos años. Busca un envase práctico, funcional y que le permita consumir el producto en cualquier lugar y/o momento del día. El cierre zipper puede ser sellado tantas veces como sea necesario, sin mermar la calidad y conservación del mismo.

Uso de materiales con menor impacto ambiental

Las bolsas con autocierre hermético, también conocidas como bolsas de cierre zip-loc, están hechas de polietileno de baja densidad (PE-LD). Un material plástico económico con buena resistencia química y con una gran barrera al vapor de agua. El LDPE proporciona alta resistencia al impacto a bajas temperaturas, un excelente sellado y mucha flexibilidad.

Este material no es tóxico, es muy ligero y de bajo coste económico. Por lo que se convierte en una opción de embalaje perfecta para cualquier producto, tanto orgánico como no orgánico.

En el siguiente video os resumimos visualmente las fases para la confección de un doypack con cierre hermético.

Fabricación de un doypack con zipper: paso a paso.

Soluciones adaptadas para líquidos, sólidos y polvos

Tal y como avanzábamos, las bolsas con cierre hermético permiten el envasado de todo tipo de productos; ya sean líquidos, sólidos, en polvo o grano. Así, entre los lineales encontramos productos de diferentes formatos y tamaños envasados en envases flexibles con cierre hermético.

Envasado de alimento líquidos: el doypack con zipper es muy utilizado para el embalaje de sobres monodosis de ketchup, mayonesa, mostaza y otras salsas.

Usos de productos sólidos: es muy frecuente encontrar gominolas, fruto secos, snacks, alimentos para mascotas, hierbas deshidratadas, especias, etc.

Aplicaciones para alimentos en granos: en este sector, el producto estrella es el café. En su medida más reducida, también se incluye el envasado de azúcar.

Envasado de alimentos en polvos: algunos ejemplos son complementos alimenticios, proteínas, leches y cereales infantiles.

Presentaciones de pequeño y medio formato

El zipper es un accesorio que se puede añadir a diversos tipos de envases flexibles, pero su formato estrella es el doypack.

La presentaciones más comunes del doypack con cierre zipper con impresión en flexografía, huecograbado u offset son a partir de 100 gramos, hasta los 2 quilos. Si el diseño de la bolsa se realiza con impresión digital y se precisa una tirada reducida, se pueden confeccionar bolsas de inferior capacidad (50g).

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